Gracias por leer mi poesía!
Al querer explicar la inspiración de este poema, me he fabricado un túnel del tiempo y me he devuelto al día que lo escribí en el invierno del 2017.
Porque ahora dormitan los sentimientos que en aquel entonces fabricaban ilusiones y sueños, entre los cuales pretendían ocultar sus dudas y temores, fue necesario visitarlos sin despertarlos; pero al mirarlos de nuevo, pude comprobar una vez más que esos sentimientos sin duda fueron genuinos y que por tanto merecen que se hayan quedado por siempre esculpidos en estos versos.
Afortunadamente, a pesar de que el encanto se esfumó, la validez del mensaje de esperanza y de fe en el amor que este poema conlleva podrá por siempre ser refrendada por similares sentimientos de algún otro enamorado ahí afuera.
CREPÚSCULO
Cuando se cubra el camino
de temor y soledad,
y oscura llegue la noche
con prisa, sin avisar,
que sienta el paso del tiempo
y me arrope la ansiedad,
y extrañe placeres simples
que ya no me pueda dar.
Cuando de silencios largos
mis días oiga llenar,
y descienda la nostalgia
con sevicia, sin piedad,
y repita mis historias
que nadie quiere escuchar,
de años que ya no recuerdo
y gente que ya no está.
Cuando el ocaso en mi mente
mi verso logre callar,
y mi espíritu dormite
con tristeza, sin soñar,
y mi cuerpo le haga eco
y lo sienta vacilar,
tímido para el trabajo
débil en la enfermedad.
Ojalá que a esa tormenta
tu amor sea incondicional,
y me ates a tu vela
con firmeza, sin dudar,
y en mi crepúsculo triste
tu paciencia sea la mar,
y tu corazón la playa
arrecife de coral,
donde mi barca cansada
sin miedo pueda encallar.
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La Amistad, Oh, ¡que regalo!
Que triste leer este poema y pensar que así será la vejez de muchos de nosotros, y que así fue la de nuestros padres que se fueron quedando solos en sus enormes casas silenciosas. Bella palabra Crepúsculo, y la imagen en mi mente es de un bello atardecer cuando el sol pinta de oro el cielo, sin embargo el poema me hace ver la otra cara del crepúsculo cuando el silencio se apodera de la noche.
Hola Isabel Cristina, gracias por tu comentario. Yo quiero también creer que la naturaleza misma del amor nos hará guardar por siempre la esperanza de encontrar una compañía para el final del camino, y por tanto, ojala que el crepusculo de la mayoria de nosotros sea como la imagen en tu mente: Un bello atardecer con el sol pintando de oro el cielo. Besos y abrazos.